¡Uf, que difícil es encontrar hoy en día
verdaderos maestros albañiles!, es màs, son tan pocos los que pudiesen recibir
el titulo de Maestros, si, así con mayúscula.
La mayoría son improvisados o ejercen el
oficio porque no les queda de otra, pero más por inercia que por verdadero
sentido del deber. Màs por necesidad de allegarse unos recursos que por verdadera vocaciòn y amor a tan importante oficio.
![]() |
El Piratita y Angelito apuntalando losa. |
Y no es por ser mal patrón sino simple y
sencillamente porque no llenan las expectativas. No están capacitados, no
terminan a tiempo las cosas. Claro, en descargo de esta situación debo decir en
honor a la verdad que por mis actividades complementarias, no he estado al
tanto de todo o el tiempo suficiente en obra. Pero allí está el quid del
asunto, no encuentro gente confiable como para dejarla en obra o al frente y
poder atender asuntos igual de importantes que la construcción.
Hablemos por ejemplo de M. (El nombre se
ha ocultado por cuestiones de privacidad), cuando lo conocí contactado por
medio de un conocido de ambos, me esperaba para empezar a una persona de edad
avanzada y muy experimentado en obra, pero llegó un individuo joven e impetuoso
y con cierto conocimiento de algunas cosas pero aun falto en otra màs.
A la larga logramos trabajar un
buen tiempo juntos pero su carácter y personalidad aunados a ciertas mañas o
deficiencias de organización y administración, dieron al traste con el asunto.,
como contaré en otra ocasión màs a modo.